Una muestra correctamente dispersada es básica para que la determinación del tamaño de partícula sea fiable

Una muestra correctamente dispersada es básica para que la determinación del tamaño de partícula sea fi able. En la mayoría de casos deben romperse los aglomerados y se debe establecer la concentración real de la muestra. En principio el proceso de dispersión puede tener lugar en una corriente de aire (dispersión en seco) o en un líquido (dispersión en húmedo). La dispersión en seco es especialmente adecuada para materiales no demasiado fi nos, que fl uyan fácilmente, que reaccionen en agua u otros líquidos. La cantidad de muestra necesaria para la dispersión en seco es normalmente signifi cativamente superior a la necesaria para la dispersión en húmedo, sin embargo ofrece mayor facilidad para obtener una muestra representativa. La dispersión en húmedo se utiliza para muchos materiales, entre ellos materiales pegajosos como la arcilla o materiales que tienden a aglomerarse en seco. También para polvos muy fi nos con tamaños de partícula inferiores a 10 µm, con frecuencia no es posible romper completamente los aglomerados usando la dispersión en seco.